sábado, 5 de septiembre de 2009

La casa de los mil espejos

Continuando con la idea que el hombre es la creatura e la creación que siempre va en busca de la felicidad, quiero compartir con todos ustedes, queridos esposos y padres, este relato para que entendamos que la felicidad es el reflejo de nuestro corazón, que a través de nuestro rostro se hace realidad.

Empecemos a leer:

Hace mucho tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, existía una casa abandonada.

Cierto día, un perro buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa. El animal subió lentamente las viejas escaleras de madera.
Al terminar de subir, se topó con una puerta semi-abierta;
lentamente entró en el cuarto.

Para su sorpresa, se dio cuenta que dentro de ese cuarto había
1000 perros más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
El perro comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco. Los otros 1000 hicieron lo mismo.
Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos.
El perrito se quedó sorprendido al ver que los otros 1000 también sonreían y ladraban alegremente con él.

Cuando el perro salió del cuarto se quedó pensando para sí mismo: - "Qué lugar tan agradable. ¡Voy a venir más seguido a visitarlo!"

Tiempo después, otro perro callejero entró al mismo sitio,
por ende, al mismo cuarto; pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros 1000 perritos del cuarto se sintió amenazado ya que lo estaban viendo de una manera agresiva.
Éste empezó a gruñir y obviamente vio como los otros 1000 le gruñían.

Comenzó a ladrarles ferozmente y ellos también le ladraron.
Cuando salió del cuarto pensó: - "Que lugar tan horrible es este. ¡Nunca mas volveré a entrar aquí!

En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía: "La casa de los 1000 espejos".

Muchas veces he escuchado que "todos los rostros del mundo son espejos"... ¿Cómo te gustaría enfrentar al mundo?.
Decide que rostro mostrarás y decide llevarlo por dentro.
Las cosas más bellas del mundo no se ven ni se tocan;
sólo se sienten con el corazón. Antes de ver un arco iris, tienes que ver un poco de lluvia...

No eres responsable de la cara que tienes, eres responsable de la cara que pones.

Si quieres lograr esa felicidad no actúes como el segundo de los perritos. Sonríe a la vida, muéstrate tú tal como eres, a pesar de los problemas, a pesar de los malos ratos, se feliz y has feliz a los demás. Has que los otros sientan lo agradable que es estar a nuestro lado.

La felicidad es también proyectar esos valores de los que hemos hablado y visto en el video, pero con un rostro bello, sincero, sin temor, libre de todo… lo podemos hacer.

Actividad:

  1. Mírate al espejo cada mañana y decide cuál reflejo vas a utilizar ese día. Practica, pon todas las caras posibles, y la que mejor te haga sentir feliz “llévala” ese día.
  2. Para aquellos que deseen compartir el mensaje en video, este link te llevará al relato en video.

Que el Señor te bendiga y te guarde…

Luis Antonio

No hay comentarios:

Publicar un comentario